¿Qué tienen en común los nazis, el detective Pepe Carvalho y un grupo de viejas chotas en Guanajuato? Fácil, les da por quemar libros, así lo consigna una reciente nota de los periódicos La Jornada y El Universal, en los que se da cuenta de que unas señoras pertenecientes a organizaciones que se remontan a la edad media, decidieron quemar libros de biología “porque enseñaban los órganos sexuales del hombre y la mujer” y porque “obligaban a usar el condón”.
Dios mío.
El problema es que respiro por la herida ya que soy autor de uno de esos libros que tanto molestan a la noble sociedad guanajuatense y que merecen la pira por lo que algo tengo que decir y es lo siguiente:
1) Cualquier persona que no sea esencialmente imbécil, comprenderá que es muy difícil dar una lección de educación sexual sin mostrar el cuerpo humano. No me imagino al profesor Fulanito diciendo, “Mira Lolita en esta lámina puedes apreciar que debajo del vestido está tu vagina” o “el pene está atrás del cierre”. Supongo que esta gente no entra a museos ni tiene cuadros clásicos porque quiere librar a sus criaturas de la diabólica visión de las “vergüenzas”. No vaya a ser que eso les despierte algo.
2) Si los libros de biología dijeran cosas como “El uso del condón es obligatorio, quien viole esta disposición se hará acreedor a 36 horas de arresto” entendería las preocupaciones maternas. Sin embargo, lo que los textos proponen –y nuevamente es obvio para quien no sea imbécil- es evitar embarazos tempranos y enfermedades de transmisión sexual.
3) ¿La SEP está pintada? Ahora resulta que un grupo de locas pueden hacer lo que les dé la gana, inclusive lograr que el gobierno estatal haga su propio libro edulcorado sin intervenir y eso le quita el aire humorístico al sainete ya que bajo ese principio al rato se prohibirá Romeo y Julieta porque estos jóvenes se dan un beso y es mal ejemplo.
En fin, cada día que pasa me convenzo de que la tan cacareada modernidad nacional cabalga a contrapelo de nuestras buenas conciencias, que existen, saben gritar y además…queman libros de doscientos pesos. Lo que no puede ser bueno por ningún motivo.
*Doctor en Ciencias por la UNAM, actualmente es asesor ecológico independiente. Ha colaborado con medios como El Financiero, Milenio, La Mosca, Etcétera, entre otros. Es autor de muchos libros, como La sala oscura, Soñé con Rocío Dúrcal y uno que quemaron en Guanajuato, llamado Ciencias 1 Secundaria.
Nota de la editora: también pueden consultar la nota en Publimetro.
En algo el programa ese de Corre GC corre tenía mucha razón. La ignorancia nos está alcanzando a todos, y junto con ella un estado de imbecilidad que no se paga con nada mas que con pobreza y mas pobreza. No me sorprende que si el texto de educación sexual asusta, pues más temor por una salpingoclasia o vasectomia. Mejor tener 5 hijos antes de someterse a tales procedimientos endemoniados. Total, despues del tercero se crian solos. Victor A.
ResponderEliminarFanáticos, ignorantes...no se puede ocultar lo que te agarras diario para mear. La educación sexual es sumanete importante y no una bola de hipócritas pseudo puritanas van a detenerlo. Así como ellas predican (quién sabe en realidad) la pureza y la moralidad, prediquemos nosotros la responsabilidad que se debe tener al iniciar tu vida sexual.
ResponderEliminarEs un tema polémico, desde siempre la iglesia ha intentado bloquear cualquier tipo de educación sexual que no sea "no te toques ahi", es comprensible que las madres católicas de México se espanten al leer que a sus hijas puras y castas les enseñan la forma de un pene.
ResponderEliminarDesgraciadamente la SEP es una institución sumamente diluida que no tiene la fuerza suficiente para hacer valer su punto a fin de cuentas ellos son la máxima autoridad educativa en México ¿o no?
Pero de la SEP mejor ni hablemos por que si de falta de cojones se trata... ellos se llevan el premio.